LECTURA DE FIN DE SEMANA

Día Internacional de la Mujer: Charlotte Perkins Gilman, una pionera del feminismo

Nuestro librólogo, Marcelo Melideo, nos invita a leer sobre una mujer que desafió su época con ideas revolucionarias. En El empapelado amarillo mostró la opresión femenina, y en Matriarcadia imaginó un mundo sin hombres.

por REDACCIÓN CHUBUT 08/03/2025 - 11.21.hs

Charlotte nació en Connecticut en el año 1860, su padre era bibliotecario y escritor, ya a los cinco años de edad leía y con el tiempo se convirtió una voraz lectora, solitaria y autodidacta.

 

En 1875 ingresó a la escuela de diseño, también tuvo múltiples trabajos y ocupaciones, dio clases particulares, fue vendedora. Se casó en 1884, aunque no con el hombre que amaba. Tuvo una hija. Desde siempre no le atrajo la vida doméstica, el matrimonio ni la maternidad. Luego del nacimiento de su hija cayó en un proceso de depresión posparto muy severo.

 

Los tratamientos de ese tiempo la obligaban que se aísle, y no le permitían escribir ni leer. Finalmente, se divorcia y comienza su carrera de escritora, mejora su salud mental y milita activamente en organizaciones feministas.

 

En 1892 publica su relato “El empapelado amarillo”. Un relato con rasgos autobiográficos. Una mujer pasa sus días en soledad en una habitación, encerrada sola con sus pensamientos, y cuyas paredes están empapeladas con un papel de color amarillo.

 

Manifestó públicamente que no todas las mujeres eran aptas para la crianza, independientemente de su deseo de ser madres. Ella misma entregó a su hija para la crianza a la nueva esposa de exmarido, a quien consideraba con mejores condiciones para la crianza. Se manifestó siempre por la libertad económica e intelectual de las mujeres. Fue acusada de “mujer desnaturalizada”. Escribió varios libros, entre ellos, “Mujeres y economía” y “Si yo fuera hombre y otros relatos”.

 

Su novela más conocida es “Matriarcadia”, una verdadera utopía feminista, publicada en 1915. Una sociedad donde solo hay mujeres. Una sociedad aislada del mundo, donde no hay guerras, solo armonía, avanzada a nivel cultural y tecnológico y en el que los hombres se extinguieron. La naturaleza se ha transformado y la reproducción no necesita de los hombres, solo mujeres que conciben mujeres.

 

Pionera, activista, intelectual, revolucionaria, luchó para que el trabajo doméstico fuese remunerado, contra el paradigma de que las mujeres eran débiles por naturaleza, enfrentó al sistema patriarcal de su época y batalló por el voto femenino.

 

Carlotte padeció de cáncer de mama y se suicidó en 1935. Tiempo antes había escrito: "Cuando toda la utilidad ha terminado, cuando uno tiene la certeza de una muerte inminente e ineludible, es el más simple de los derechos humanos elegir una muerte fácil y rápida en lugar de una muerte lenta y horrible”. 

 

IG @marcelomelideo2021

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