La Feria del barrio San Martín ya reúne a unos 800 feriantes

La feria del barrio San Martín de Trelew experimentó en los últimos años un crecimiento notable, tanto en extensión territorial como en cantidad de feriantes. Actualmente, el tradicional espacio ferial reúne a unos 800 feriantes aproximadamente, distribuidos entre el playón ubicado sobre calles Malvinas Argentinas, Rivadavia Norte y 13 de Julio, la plaza de la Amistad y sectores adyacentes al Santuario Nuestra Señora de la Paz.
Este espacio, que hoy es un punto de referencia para cientos de vecinos, comenzó su historia en el año 2001 en calle Canal, y en 2016 se trasladó a su actual emplazamiento, donde el crecimiento fue sostenido hasta convertirse en una de las ferias más grandes de Trelew. En ella se pueden encontrar los fines de semana todo tipos de productos, nuevos, usados, «todo lo que se usa en casa» y lo que no se usa, también.

«LA NECESIDAD ECONOMICA ESTA A LA VISTA»
En diálogo con FM EL CHUBUT, Manuel Cheuque, integrante de la Feria del barrio San Martín y dedicado allí a la venta de choripanes, describió el contexto social que explica el aumento de feriantes, aclarando que no es de ahora, sino desde hace unos dos años. «Es impresionante cómo ha aparecido gente que quizás tiene un trabajo, pero a la misma vez no le alcanza y va a hacer una moneda extra para tratar de sobrevivir, porque todos sabemos que todo lo que es la necesidad de gastos, de luz, gas, se fueron muy altos. El tema monetario ya no es lo mismo que antes y ahí está reflejada la necesidad económica que hay». Respecto a la cantidad de puestos, señaló: «Yo diría que en el playón, lo que es el predio, deben haber unos 600 o 700 por lo menos. Luego está la plaza -de la Amistad, que casi llega hasta la Av. de los Trabajadores de no ser por una canchita en la que siempre hay chicos jugando al fútbol- que se fue llenando, hay muchísima gente también ahí, mucha gente tiene necesidad y van y tiran una manta. Habrán unos 800 en total», estimó.
Incluso, remarcó que muchas personas que cuentan con empleo formal también recurren a la feria. «Yo he hablado con gente conocida que trabaja en la fábrica y de ahí se van a la feria».

MAS FERIANTES, MENOS VENTAS
Cheuque explicó que el mayor crecimiento se dio hace aproximadamente dos años, aunque acompañado por una fuerte caída en las ventas y que no necesariamente tendría que ver con la competencia. «Hace como dos años empezó ahí el incremento, que fue muchísimo. Pero a la misma vez fue baja de venta total para todos. Yo vendo choripanes, y fue una baja, ponele hasta ahora, de un 50% a lo de siempre».
La situación se repite en otros rubros. «Hay personas que llevan productos y nos dicen, ‘hoy hice mil pesos para llevar a la casa’», graficó.

ORGANIZACION Y SEGURIDAD
En medio del crecimiento, destacó el nivel de organización interna. «Generalmente ninguna feria tiene policía y nosotros sí, tenemos seguridad, contratados por la misma feria», indicó, observándose también la presencia de cuidacoches.
El feriante habló sobre la coyuntura económica general, con la que fue contundente: «No hay efectivo, no hay dinero, el tema monetario está muy jodido con la ciudad de Trelew. Esperando que aparezcan soluciones, pero aparecen muchas de mentiritas, el caballo de batalla siempre fue el parque industrial, que muchas veces lo quieren remontar, o grandes empresas que se quieren radicar acá en Trelew», aunque se está a la espera de esas inversiones, explicó.

MERCADERIA AL LIMITE Y REMATES INFORMALES
Una de las situaciones que más se repiten es la presencia de comerciantes formales que llevan productos a punto de vencerse para venderlos en la feria. «Hay gente que tiene negocios, puede ser un mercado, que lo que está a punto, al límite, capaz que antes de vencerse lo van a rematar ahí a la feria. Yo he comprado paquetes de porotos que van a vencer dentro de dos semanas y me he llevado varios. Y gente que tiene tienda van a rematar ahí».
Al mismo tiempo, observó una merma en la concurrencia de compradores. «Antes se veía llenísima, y hoy en día se ve poco, si bien está el precio económico. Yo compro ropa y cosas usadas y están baratas».

NUEVAS FORMAS DE REBUSQUE DIARIO
Cheuque también hizo referencia a personas que, sin ser feriantes formales, recorren el predio desde temprano vendiendo comida. «Hay gente que no es feriante, pero emprendieron eso de, ya desde las ocho o nueve de la mañana andan con canastitas con tortas fritas, con pizza, con milanesas. Nosotros estamos armando, bajando las cosas y ya nos pasan a ofrecer, son cosas que antes no pasaban. Uno ve que la familia quiere salir adelante».

EL DEBATE CON EL SECTOR COMERCIAL
Por otro lado, habló de los reclamos de comerciantes por la falta de pago de impuestos en las ferias, reconociendo: «Somos conscientes, yo soy consciente que si yo tuviera un trabajo dejaría ésto. Sé que el comercio paga impuestos, los ingresos brutos, se pagan muchas cosas, el local, gente trabajando en blanco».
En ese sentido, consideró alternativas de formalización: «Se podría hacer una cooperativa, de un rubro, y que estemos en blanco, sería bueno que muchos nos juntemos y organizarnos. Hemos averiguado y están muy altos los costos. Nosotros la verdad, llevamos para sobrevivir esta semana nada más».
En ese marco se refirió a la imposibilidad de proyectar a futuro, significando que lo que venden, no es suficiente para realizar por ejemplo, grandes viajes. 
«Yo no tengo programado un viaje a la cordillera ni a Brasil. Si pensamos salir, es a Playa Unión y ningún lado más, es el gusto que nos vamos a dar y vamos a seguir trabajando». Y añadió: «Este mes de Navidad fue un mes malísimo para todos los compañeros». En su caso particular, explicó que realiza trabajos de soldadura. «Pero son todas changuitas».