María Eugenia Estefanía confirmó su renuncia a la delegación del IPV en Esquel

Según expresó la presidenta del radicalismo esquelense, la determinación no fue sencilla porque había asumido el cargo «con fuerte compromiso social». Sin embargo, sostuvo que los acontecimientos de los últimos meses la llevaron a poner fin a su gestión. Agradeció la oportunidad otorgada por el Gobernador, gestionada a través del intendente Matías Taccetta, pero remarcó que la situación interna de la delegación terminó siendo determinante.
Estefanía relató que desde su llegada al organismo enfrentó resistencias a las modificaciones que intentó implementar. Aclaró que esas tensiones no involucraban a todo el personal, aunque derivaron en episodios «desagradables» que, según afirmó, llegaron a constituir situaciones de «violencia laboral».
Entre los hechos que mencionó, recordó un episodio ocurrido pocas semanas después de asumir: le hicieron firmar memorandos con información incorrecta, documentación que luego fue utilizada para presentar -de manera anónima- una denuncia penal en su contra por presunta usurpación de título, causa que fue desestimada rápidamente.
También señaló que llegó a reforzar la seguridad de su oficina, al denunciar que personas ajenas ingresaban en su ausencia para retirar documentación. A su entender, se trató de un hecho «institucionalmente muy grave» y marcó un antes y un después en su permanencia en el organismo.
Agregó que, tras el fracaso de la denuncia en su contra, comenzaron ataques mediáticos provenientes de un medio local, lo que terminó de definir su decisión de apartarse del cargo.
Pese a los conflictos internos en la sede de Esquel, Estefanía destacó que mantuvo un buen vínculo de trabajo con las delegaciones de Lago Puelo, Epuyén y Gobernador Costa, donde -según dijo- no registró inconvenientes.