El Club Guillermo Brown, 80 años de historia y un futuro que pide respuestas

El Club Social y Atlético Guillermo Brown cumple 80 años este martes 14 de enero, una fecha que invita a la celebración, pero también a la reflexión sobre el camino recorrido y el desafío que representa mirar hacia adelante. Fundado en 1945 por el prefecto José Ramón Furnillo, quien inspirado por la figura del Almirante Irlandes Guillermo Brown decidió darle su nombre, el club se convirtió en una institución icónica de la ciudad Puerto Madryn.

Desde sus primeros pasos, con el fútbol como piedra fundacional, Brown no tardó en dejar su huella. Afiliado rápidamente a la Liga de Fútbol del Valle del Chubut, extendió su influencia al básquet, construyendo sobre estas dos disciplinas un legado repleto de hazañas, ídolos y títulos que alimentan la identidad de “La Banda”.

Hoy, con 80 años a cuestas, Guillermo Brown es una institución en busca de certezas. Si bien el básquet vive un presente auspicioso, el fútbol, su disciplina insignia, atraviesa un periodo de incertidumbre tras el descenso del Nacional B al Federal A. Este retroceso no solo fue un golpe deportivo, sino también simbólico: un club acostumbrado a competir en la segunda categoría del fútbol argentino enfrenta ahora la necesidad de reinventarse en un contexto menos visible y más austero.

La reciente asunción de Mariano Eliceche para un segundo mandato como presidente ha sembrado expectativas y dudas en partes iguales. En su discurso de asunción, Eliceche prometió un cambio de rumbo: una apertura social, crecimiento en la masa societaria (actualmente reducida a 121 socios) y avanzar en obras. Sin embargo, a poco menos de un mes de sus palabras, el silencio predomina, especialmente en el plano futbolístico, donde el tiempo apremia para planificar la próxima temporada.

PRESENTE

El básquet es, sin dudas, el punto más alto del club en este aniversario. Bajo el liderazgo del empresario local Pablo Texeira, el proyecto avanza con una fórmula de trabajo basada en la austeridad y la planificación. Hubo obras en el gimnasio “Benito García”, se fortalecieron las divisiones formativas y este año competirán en el Torneo Federal, con el sueño de un ascenso que, aunque difícil, parece posible gracias al orden y la visión que caracteriza al equipo de trabajo.

En contraste, el fútbol enfrenta una realidad mucho más sombría. Con el inicio del Federal A a solo dos meses, no hay indicios claros sobre el camino a seguir. La dirigencia busca recursos, pero los silencios prolongados dejan entrever un año de transición, lejos de los grandes objetivos que supieron marcar la época dorada del club en el Nacional B.

80 AÑOS DE VIDA

El aniversario número 80 encuentra al club en una encrucijada. Por un lado, la rica historia de Brown exige ser honrada con proyectos sólidos y sostenibles; por otro, la actualidad demanda decisiones urgentes para garantizar un futuro estable. ¿Cómo es posible que un club con tantas décadas de vida, tantas glorias y una ciudad que respira deporte tenga solo 121 socios activos? Este dato no solo preocupa, sino que interpela directamente a la dirigencia actual.

Eliceche tiene en sus manos la oportunidad de convertir al club en una institución más abierta, con mayor participación social y obras que lo modernicen. Que su discurso no haya sido solo una promesa.